Si piensas que puedes tener una vida mejor, hay más probabilidades de que tengas una vida mejor. Y digo probabilidades porque si no tomas acción, nada va a cambiar. Si piensas en esa vida mejor “desde el sofá” ya te puedes imaginar el resto

Ahora bien, si piensas que la vida que tienes es la que te ha tocado, que el éxito de otros es suerte, oportunidades que tu no tienes, que es demasiado tarde para ti, y en definitiva todo lo que te saca de la ecuación de éxito, es una GARANTÍA de que nada va a cambiar porque está garantizado que si no lo crees es una certeza que no vas a tomar acciones, ¿para qué lo ibas a hacer?.

Pasamos la vida poniendo en nuestra mente escenarios negativos o de limitación en base a cosas que el 98% no son reales ni van a ocurrir y eso te paraliza. ¿No crees que es mejor sustituir esos pensamientos por cosas que te inspiren a tomar acción?

En cuestión de probabilidades, imaginate una diana, y dos personas, ambas ninguna idea de lanzar ni habilidad previa, una cree que puede dar a la diana "y “lanza”, otra no cree que pueda y “no lanza”. ¿Quien crees que tiene más posibilidades de darle el que lanza o el que no?

Parece tan lógico y obvio que no prestamos atención a este principio que aplica a todo.

TODA ACCIÓN PRODUCE UNA REACCIÓN.

NINGUNA ACCIÓN, NO PRODUCE NADA.

Ahora mueve ficha. O pones acción y aumentas tus probabilidades, o no haces nada, y no consigues nada.

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— Jose Torres
“Porque el juego no se trata de sobrevivir, sino de vivir.”